¿Cómo se escribía un
post? Ah sí, un saludo primero. ¡Hola a todos! Esta es la última vez que pasa
tanto tiempo antes de volver a escribir. Ya sabéis, el verano nos hace a todos
más vaguetes.
Hoy lo que quiero es
enseñaros un poco de Valencia, una ciudad que sin duda nos ha sorprendido
gratamente.
Fui con Jaime a pasar
unos días a Valencia. Sí, somos unos valientes y nos vamos en pleno julio, con
ola de calor, a patearnos una ciudad con alto nivel de humedad. A pesar del
largo trayecto en autobús, ¡la ciudad bien merecía una visita! Nos alojamos en
unos apartamentos en el barrio del Carmen, para mí el barrio más precioso y
alternativo de la ciudad. Vale la pena dar un largo paseo por todas sus calles
porque en cada esquina encuentras un local interesante. Eso fue lo poco que hicimos
el primer día, dado que llegamos bastante tarde.
El siguiente día visitamos
la parte histórica de Valencia: la catedral, el palacio del Marqués de Dos
Aguas o el gran mercado, donde me encantaría poder comprar todos los días. Y la
cena en La Salita, restaurante de la chef Begoña Rodrigo, fue el cierre
perfecto para aquel día. El menú era lo que esperaba: sabores que ni imaginas y
cada plato diferente del resto. Es una pena que por la pantalla no se puedan
probar. Para aquellos que creen que este tipo de cocina "no llena",
os aseguro que acabamos saciados y llenos.

El tercer día tocaba
excursión al Oceanographic, a ser un rato niños. Jaime no podía dejar de mirar
los tiburones, que tenían cara de buenos amigos, y yo me lo pasé como una niña
pequeña viendo el espectáculo de los delfines con un equipo de natación
sincronizada. Pensando que el día no podía mejorar más, acabamos comiendo en
Tommy Mel's, sitio del que soy muy fan. Y como se suele decir "nos pusimos
moraos". Para terminar nuestra escapadita bien, acabamos la tarde en la
Malvarrosa. Agradecimos mucho el bañito después del día de calor que habíamos
pasado.
Y este fue todo el viaje,
puesto que el trayecto de vuelta al día siguiente era bien temprano. Espero no
haberos aburrido demasiado y que os animéis a visitar Valencia, os aseguro que
vale la pena.
Besos,
C.-